Blackberry ha presentado su esperanza para retomar el mercado de hardware, la Blackberry Passport. Es un teléfono con pantalla cuadrada y las dimensiones similares a las de un pasaporte, de ahí deriva su nombre. Está enfocada para el sector ejecutivo, de empresas, dónde Blackberry se quiere imponer tras las debilidades de seguridad mostradas por otros fabricantes.
BlackBerry es reconocida por haber creado los teclados más efectivos del mercado. Desde el Bold 9000 hasta el Q10, pasando por el teclado virtual del Z10, BlackBerry hizo de teclear sin errores una de sus principales ventajas. En esta ocasión, han presentado un nuevo teclado físico de solo tres filas de caracteres que es un 50% más ancho que sus anteriores diseños. ¿Por qué? Porque son necesarias dos manos para escribir rápido en cualquier teclado. El Passport asume que el usuario utilizará sus dos pulgares y, por eso, pone entre sus manos el celular más ancho posible. Después de un par de días usándolo, uno siente que las pantallas del resto de celulares son muy pequeños en comparación a las 4,5 pulgadas del BlackBerry.
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). John Chen está esperanzado. El CEO de BlackBerry apunta que los resultados de la compañía van a mejorar con la nueva cartera de productos y servicios que han presentado.... aunque la rentabilidad no llegará hasta 2016.
Chen dice que ha recibido ya 200.000 pedidos de Blackberry Passport, un smartphone que regresa a la empresa a sus raíces: los dispositivos para empresas.
La empresa antes conocida como RIM apostó por una pantalla cuadrada de 4.5 pulgadas (diagonal) FullHD con resolución de 1.400 x 1.400.
El dispositivo no es completamente táctil: para regresar a sus raíces, ha apostado por un teclado físico en este terminal.
Y ha lanzado 2 servicios para sacar mejor provecho del ambiente ejecutivo del teléfono:
> Blackberry Assistant, asistente de voz que tiene acceso a archivos protegidos por el ambiente de trabajo, por lo que su integración es mejor que la competencia; y
> Blackberry Blend, un sistema de trabajo en la nube, que gestionar información de la Blackberry en computadores y tabletas. También tiene acceso a la data de trabajo sin necesidad de VPN. El sistema permite recibir y gestionar mensajes de Blackberry Messenger, email, calendario, pero sólo con el permiso del usuario.
“Feo”, “horrible”, “un ladrillo”… Un paseo por las redes sociales a las horas de haber conocido el aspecto del Passport, la última bala de BlackBerry, nos hubiera hecho pensar que la firma canadiense había firmado definitivamente su extinción. Pero en esto de la telefonía móvil, hasta el rabo todo es toro, y eso lo conoce bien John Chen, un curtido directivo que conoce de primera mano cómo dar la vuelta a una empresa en tiempo de descuento.
Su especialidad son los marrones, y el de BlackBerry era uno de dimensiones descomunales; lejos de arredrarse, el CEO se remangó y comenzó las reformas atacando en dos flancos: el más evidente, el saneamiento de las cuentas, pero el más complejo sin duda, el estratégico. ¿Cómo lograr que una firma de semejante solera volviera a números negros despertando la ilusión de su mercado? Aquí, seamos sinceros, nadie daba dos duros por la marca. Con Apple y Google capitaneando a sus anchas y Microsoft con el billetero lleno abriéndose hueco, realmente no había muchas oportunidades.
Pero había una grieta en ese muro de la impotencia. Y Chen la ha encontrado. El Passport –un smartphone que debe su nombre a que tiene exactamente las dimensiones de un pasaporte– salió a la venta la semana pasada y no hubo que contener mucho el aliento para descubrir si Chen tenía que hacer el petate y la firma bajar la persiana: el dispositivo arrasó en su estreno.
¿Cómo? ¿Qué? ¿Aquel ladrillo tosco y feo tenía un mercado? La carta extravagante de Chen ha funcionado. Por supuesto que sí: 200.000 unidades vendidas en los dos primeros días, y atentos al dato, porque esto sí que es significativo, se agotó el stock en tiendas como la mismísima Amazon, en la que fue el smartphone más vendido mientras era posible comprarlo. Y hay que tener en cuenta además, como destaca el analista John Gold, que se trata de un equipo de nicho, muy orientado al mundo de la empresa y con un mercado mucho más reducido que equipos como el iPhone o los Nexus.
¿Qué ha sucedido entonces para que Passport abra las puertas a la esperanza en la compañía? Sería tentador pensar que el mercado se ha lanzado en plancha a por este dispositivo por considerar que podría tratarse del último equipo genuinamente original que comercializara la casa, pero no, realmente los de Waterloo han vuelto a jugar con la misma mano que los llevó a ser los líderes en su día.
Con el paso de los años olvidamos rápido, pero conviene recordar que BlackBerry fue un pionero en su día al estrenar el formato y funcionalidad (correo electrónico en el móvil) en un mercado que no estaba habituado a esto. En este caso, el que pegó primero sí lo hizo dos veces y las Curve y demás se convirtieron en un estándar que encumbró a los días más gloriosos a la compañía canadiense.
El Passport ha llegado con el mismo objetivo: un smartphone diseñado para ser eminentemente efectivo para su mercado, el del usuario corporativo. El fabricante sabe, por experiencia, que su cliente no se preocupa en exceso por el aspecto del dispositivo, sino que lo que quiere es resolver tareas y hacerlo de una manera eficiente.
El Passport es rompedor y, desde luego, no sigue los patrones de diseño actuales en el mercado, pero esto que muchos ven como un punto débil en el equipo es en realidad su gran fortaleza: gustará o no, pero cuenta con una innegable personalidad. Sumemos a esto que disfruta de uno de los sistemas operativos más sólidos del mercado, el teclado físico con una integración táctil a la que, una vez habituados, es un auténtico killer, para entender que su mercado lo haya recibido con los brazos abiertos.
Los que hayan criticado al equipo por tosco o porque no puede subir fotos a Instagram, realmente no han entendido el alcance de la maniobra de Chen y compañía, que hila mucho más fino. BlackBerry lleva años ofreciendo productos muy sólidos en el mercado y eso deja su poso, pero ahora además cuenta con una respuesta más acorde a los nuevos tiempos. Chen ha avanzado con una euforia bien disimulada que la compañía volverá a beneficios en 2015, y que, en realidad, acaba de comenzar la fiesta: la nueva versión de la plataforma, BlackBerry 12, será presentada el 13 de noviembre y sospechamos que con ella habrá más dispositivos… raros.
Fuente: Urgente 24
