Crónica de una muerte anunciada
Inseguridad, un problema que avanza, y el gobierno nacional no parece tener conciencia de la gravedad por su inacción para tomar medidas expeditvas y con resultados concretos. Para algunos funcionarios "es una sensación"... |
Ausencias estatales, falta de conducción, miopía sobre la problemática social, adicciones y acceso irrestricto a las armas. Un combo semejante deriva en muertes indefectiblemente. Viedma llora a Cristian Lucanera, pero las condiciones están dadas para que no sea la última víctima. |
Viedma. El genial Gabo escribió la historia de un crimen que todo el mundo sabía que iba a suceder y sucedió. Las ausencias estatales, la nulidad de respuestas y las desigualdades sociales indicaban que en Viedma, una muerte a manos de precoces victimarios/víctimas iba a ocurrir. Y ocurrió. Gente laburadora, honesta, que se levanta temprano, manda a sus hijos a la escuela. Y a la que un puñado de excluidos de toda exclusión les hace la vida imposible. ¿Nadie puede con esos pibes? ¿Es que no hay rehabilitación posible? ¿La Justicia no tiene la suficiente fortaleza para poner cada cosa en su lugar? Porque el garantismo no es impunidad. Ser garantista es garantizar que alguien que cometió un delito sea juzgado en un juicio justo, no que se aproveche de las puertas giratorias de comisarías y juzgados. Como fue la de Diego Bonefoi y los otros dos pibes en Bariloche, como la de Guillermo Trafiñanco en Viedma. Como la de Irma Casadei hace poquito. Como la de Atahualpa, que en breve se cumplen tres años de su irresuelto crimen. Fuente: Noticias Net |
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