La Escuela N° 37 celebró sus Bodas de Plata
El acto se celebró el pasado 3 de septiembre en la escuela N° 37 ubicada en la zona rural de José B. Casás.
Un acto lleno de emoción donde no faltaron las lagrimas.
Su Historia
La historia de la educación formal y primaria en esa comunidad se inicia en el año 1944, en que se crea la Escuela N°20. La misma funcionó en un campo vecino al actual emplazamiento perteneciente a la sucesión Casás. Como es de imaginar, a pesar de las carencias, contó con lo más importante: un gran grupo de alumnos (aproximadamente 30), de diversas edades, cuyos padres esperaban ansiosos la apertura de la escuelita.
En aquella época las familias eran numerosas, el transporte consistía en caballo, sulky o carro; el hombre de campo consideraba a la educación como uno de los bienes más preciados. El maestro se hospedaba en la casa de algunas de esas flias, donde recibía un trato respetuoso y cordial, también por parte de sus alumnos.
En el año 1955 se creó el actual edificio, que por falta de matrícula se clausura en 1978. La historia de la Escuela N° 37, comienza en el año 1986 cuando un grupo de padres:. Gross, Otermin e Iturrióz, vecinos a la escuela, inicia trámites para su reapertura que se produce el 21 de Mayo de ese año por Resolución 2059. Se crea con el N° 37 y se le otorga el mismo nombre que a la escuela N° 20 “fray Justo Santa María de Oro”.
La matrícula inicial fue de seis alumnos que cursaron 1° a 7° grados.
Síntesis del discurso
25 años pasaron muy rápido. Hubo momentos gratos pero también difíciles como la terrible sequía que asoló la región, la tristeza de ver diariamente morir el ganado, la arena que fue depositándose sobre los campos y en el interior de la escuela y que, junto a la acción del viento muchas veces hacía el ambiente irrespirable pero, con los alumnos limpiábamos y las clases continuaron. la organización de esta conmemoración insumió muchísimo trabajo.
Actualmente, el Estado asiste a las escuelas rurales con la copa de leche para los alumnos, la electricidad para el funcionamiento de computadoras, televisión satelital y digital, heladera, calefacción, libros, CD, útiles…
Pero …¡faltan alumnos! ¡La gente debe volver al campo, vivir en el lugar donde trabaja, donde produce! Este es un día de celebración, ya lo anunciaron las 25 campanadas y la escuela aún permanece abierta… Aún, a la espera de más alumnos…
Su Directora, Gladys Gismondi, muy emocionada por el acto expreso:
“La ceremonia fue muy emotiva desde el momento en que cinco ex alumnos tocaron las 25 campanadas, luego, sentados en un lugar que habíamos preparado especialmente para todos ellos, les tomé asistencia. Allí, al mirarlos y agradecerles su presencia comencé a quebrarme y al abrazarlos ya no me pude contener, a algunos no los veía desde que habían finalizado la escuela, hoy son hombres y mujeres con hijos. Otros, no alcanzaron a llegar a tiempo para el acto por razones laborales, pudieron asistir por la noche en que compartimos una cena a la canasta, algo sencillo pero que me permitió hablar con cada uno de mis ex alumnos y sus familias, que era lo que yo más ansiaba. Fue el momento en que pude acariciarles la cabeza, en que se sintieron niños nuevamente y yo la eterna maestra, con 25 años en esa escuela pero con todas las ganas de seguir educando, formando personas de bien”.
Info Stroeder
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Sra. Gladys Gismondi -