Narcotráfico: "No vemos que tenga repercusión" en las autoridades

"RONDA LA VIDA DE TODOS LOS CHICOS"

El vocero del Episcopado reiteró que no hay "medidas acordes a la gravedad del problema", tal como lo expresó el documento dado a conocer la semana pasada.

Luego de que la Iglesia Católica argentina advirtiera en un documento sobre el avance del narcotráfico en el país, desde el Episcopado ratificaron que este lunes que "no hay medidas acordes a la gravedad del problema" del narcotráfico.

"Este comunicado es una advertencia en la que reflejamos las problemáticas que vemos. En esta reunión se juntaron obispos de todo el país y lo que salió como tema prioritario fue esta realidad en la que cada vez hay más familias preocupadas por el tema de las adicciones y no vemos que esta problemática tenga repercusión en quien tiene la responsabilidad de conducir las cosas. No hay medidas acordes a la gravedad del problema", señaló el vocero de la organización religiosa, el obispo Jorge Oesterheld.

"La Argentina está corriendo el riesgo de pasar a una situación de difícil retorno", advirtieron los obispos la semana pasada en un documento que presentaron los presidentes del Episcopado, monseñor José María Arancedo, y de la Comisión de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano.

Oesterheld, en tanto, señaló que "es un peligro que ronda en la vida de todos los chicos, no sólo en la de los adictos" y añadió: "es una situación de angustia a la que hay que responder, no sólo desde el Gobierno sino desde la sociedad entera".

"Pretendemos que se asuma el tema para que ocupe el espacio correspondiente en el espacio público. Es muy preocupante que la sociedad en su conjunto no lo considere una problemática", agregó.

En declaraciones a Radio Rivadavia, Oesterheld señaló que "el tema de la droga está insertado como el divertimento del fin de semana y no podemos acostumbrarnos a eso porque nos hace un daño enorme y destruye familias todos los días".

"Es muy preocupante la advertencia de otros políticos que señalan a otros lugares como los generadores del problema y no los suyos propios. Este es un problema de toda la sociedad y de la clase dirigente", subrayó.

También señaló que "la diferencia con el 2001 es que las instituciones democráticas que deben encargarse de esta, están funcionando muy bien, por lo tanto tienen que ocuparse".

"Nos tenemos que cuidar unos a otros, debemos ser capaces de sentarnos para trabajar esto porque está en juego la vida de todos los chicos y es imperdonable que no lo hagamos", remarcó.

Fuente: Urgente 24